El viernes pasado se me hizo un poco tarde, olvide mis anteojos en casa y como se dice llegue corriendo al trabajo. Ya dentro de la escuela empecé mi día normal, pero todos los niños se me quedaban viendo, cuando recibí en la puerta los lactantes ponían cara .de asombro y Gustavo si se mostro renuente a que lo cargara. En el salón los niños también me miraban detenidamente hasta que:
-Lot se acerco y me dijo Maestra ya puedes ver-
-Le dije a que te refieres.- Lot contesto- tú dices que si te quitamos los lentes no puedes ver y hoy no los trajiste por eso ¿ya puedes ver?
Po un momento no supe que decirle, porque efectivamente esas eran mis palabras (cuando algún niño me quería quitar los lentes le decía – no me los quites porque no puedo ver_)
Reflexión
Debemos tener cuidado en lo que decimos porque después será utilizado en nuestra contra jijijiji.
Los niños son muy inteligentes y recuerdan lo que hacemos, decimos por muy pequeños que sean y en mi caso por los anteojos hasta los bebes se dan cuenta que tango algo extraño cuando se me olvidan o no los uso.
Pues como dice la compañera, todo lo que digamos será usado en nuestra contra, no debemos olvidar trabajamos con pequeños, lo que significa que estan muy despiertos y constantemente estan absorbiendo como esponjas todo lo que les decimos y cuando menos no lo esperamos por alguna situación lo utilizan para nosotros y es entonces cuando nos quedamos sin palabras y notamos la regamos o acertamos según sea el caso
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